Se me pegan los sueños
con su velo de incógnitas
y esa vieja capacidad
de escribir la historia
es una señal que delata
que el camino avanza
hacia el abismo,
la transitoriedad,
el nacer, el perecer
que es, al final,
la forma de todo lo real.
Toda creación
sucumbe a la descomposición,
todo pensamiento,
toda invención,
toda hazaña
han de sumergirse
en el olvido.
Solo diez dedos
me sostienen
a esa cama
en que soles pálidos anidan,
algo pequeño se ha perdido
al ritmo ciego
de nuestro fuego.
AOC.2014
Gráfica: 1. de la red // 2. Fritz Zuber Buhler // 3. Jaroslav Wieczorkiewicz
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