Proliferación de murmullos

La crisálida del llanto

emerge para evaporarse

y dejar un suspiro leve

en el último rincón del alma.

Ahora el viento

amontona círculos de hojas

en torno a los troncos secos,

yo caparazón y paraguas

de medio día

no puedo abstraerme

y te miro hundido

dentro de otro tú mismo,

inmóvil, como de piedra,

duro para el que te ama,

con tu boca rebosante de noche,

donde una estrella de mentira

guía tus pasos.

Y vengo otra vez,

para comenzar de nuevo

con este taller de salvaciones,

de delicada alquimia,

aceite crepuscular,

cataplasma de sueños petrificados,

que en un grito

ascienden con la noche

devorando todo lo perdido.

AOC.2013

Gráfica: Irene Sheri // Joseph Cornell // Stanko Abadzic

Vida eterna

Como un sin igual colapso de transparencias

o muletillas
de avezados cantores

 en cotidiana armonía,

reparten dones plásticos, sintéticos,

adosados a esa amalgama de mentiras

con que se pegotean

las nuevas realidades.

Enormes muros separan

mi claro-oscuro

de las entendederas pobres

de algún amado

con su parloteo de mundos baratos,

de especulaciones, rabias,

y ese enorme entramado de apariencias

que vierte su liquido petrificador

en todo lo que toca.

Un pronunciado ángulo de caída

me aferra al vértigo,

al perfil de lunas pálidas

en una carrera inútil,

sin amor propio,

ni sentido común.

AOC.2013

Gráfica: China Doll // Duy Huynh // Celal Ozdemir

Huesos de dragón

Creo en sapos,

también en culebras

acurrucadas en la cueva

del destino.

La vida y sus pequeñeces

me separan de la muerte,

me abalanzo en ideas y proyecciones,

solo para retrasar la visión final.

Cuando las palabras

se vuelven superfluas

es buen momento

para besos proféticos,

revelaciones de huesos oraculares

de aquellos que quiebran

la mano del tiempo,

justo cuando la noche

pierde su cara.

Todo transita

en la subjetividad

de la mente,

como palabras extraviadas

en su propio significado,

como una pena de infancia

que se pega a la noche.

AOC.2013

http://es.wikipedia.org/wiki/Hueso_oracular

Gráfica: George Tsui // Robert Doisneau // Maja Vuckovic

Corte de apelaciones

Tal vez

no me ame nadie en particular;

el peso muerto de la inexactitud

abruma, fatiga,

penoso resulta estar

donde no estamos,

como una luz que se pasea

por una noche acumulada
de hálitos trasnochados.

Los ingenuos de primavera,

los silenciosos incurables,

y aquellos que abrazan las sombras

no caben en el cuadrante

solar de tu vida.

Quiero mi propio salto mortal

y sobrevivir para contarlo,

ser esa terraza que da al viento,

perdida en el perfume natural de la infancia

que se pega a las rocas,

a ese esplendor prometido

de las formas y causas
que negligentemente perdemos.

AOC.2013

Gráfica: Francois Berthou //Mats Gustafsson // Ruben Ireland

Caparazón y paraguas

Mi lamento

es ya de tarde antigua,

mis gestos sonámbulos se deslizan

como quien espera en vano.

La noche reúne la casa y su silencio

en el lento circulo azul del tiempo,

y un ademán de adiós pasa por las hojas,

tan nítido y preciso

como el vacío.

Palabras desnudas se besan

en el rodar intacto del tiempo,

con sus vocales encadenadas al eco,

y esta alma de lagos secos y tristes

con su cuerpo de mohos

y aperos de fragua

persigue su cola

prisionera de su propia ronda.

He de hartarme

de mi propia agonía

aferrada a esa negrura de olvido;

el agua desnuda

mastica fragmentos de sueños,

tracto de signos

donde la periferia del ojo

rescata a un perdido ángel

que embelesado admira unas joyas falsas.

AOC.2013

Gráfica: De la red // Adams Martinakis // Rene Gruau

Limpieza de cabezales

Nada detiene la caída de un sueño

al torrente imparable del día,

bajo un cielo que renuncia a ser cielo.

Algo sale de mi boca

con la limpia negrura de la gasolina

y una voz que masticó los vientos

de otra selva.

Es mi canto de ira,

hay odio en mi,

fuerte y antiguo,

construido lámina a lámina,

como un cielo vacío, sin limites.

En secreto me enamoro

perdidamente de llamas,

hacia afuera revolotea

un destino que no encuentro,

sólo arenas abajo del viento

frotando al sol en su ruta.

Sumerjo como olas la piel

en contextos no siempre reales,

en abluciones de escarnio,

lavativas trabajadas con un cincel

frío y dañino,

donde el dolor se aletarga

pero no se extirpa.

AOC. 2013

Gráfica: Victor  Nizovtsev // Virgil Finlay //Mary Qian