Corte de apelaciones

Tal vez

no me ame nadie en particular;

el peso muerto de la inexactitud

abruma, fatiga,

penoso resulta estar

donde no estamos,

como una luz que se pasea

por una noche acumulada
de hálitos trasnochados.

Los ingenuos de primavera,

los silenciosos incurables,

y aquellos que abrazan las sombras

no caben en el cuadrante

solar de tu vida.

Quiero mi propio salto mortal

y sobrevivir para contarlo,

ser esa terraza que da al viento,

perdida en el perfume natural de la infancia

que se pega a las rocas,

a ese esplendor prometido

de las formas y causas
que negligentemente perdemos.

AOC.2013

Gráfica: Francois Berthou //Mats Gustafsson // Ruben Ireland