

Se me va de las manos,
busco a tientas por el mundo
como una larga y ciega serpiente
que los juglares
agitan con cadencia
en el extremo de sus bastones.
Con un brillo fosfórico y demente
me sumerjo en aguas transparentes,
hablo con sus rumores
y ondulo con sus pliegues
en voces incomprensibles
al borde del abismo.
La arpía que habita en mi
suda el veneno
de mi extraño cariño,
no existe la palabra indiferencia
en mi natural apatía,
no sé querer
sin cuidar lo que quiero.
AOC.©.2010
busco a tientas por el mundo
como una larga y ciega serpiente
que los juglares
agitan con cadencia
en el extremo de sus bastones.
Con un brillo fosfórico y demente
me sumerjo en aguas transparentes,
hablo con sus rumores
y ondulo con sus pliegues
en voces incomprensibles
al borde del abismo.
La arpía que habita en mi
suda el veneno
de mi extraño cariño,
no existe la palabra indiferencia
en mi natural apatía,
no sé querer
sin cuidar lo que quiero.
AOC.©.2010

Ilustraciones: Danni Shinya Luo - Melissa Peck
4 comentarios:
Etiquétese como anguila más que como arpía, nadadora fluorescente.
D.
Eso no es una arpía, eso es un pedazo de mujer.
Besos
Dan., gracias, eres todo un poeta... tambien me gustaria formar parte de algunos peces de la fauna abisal que cuentan con iluminación propia para conducirse por las oscuras profundidades.
iluminados besos
AOC.
Gracias Mária, que bueno que te guste.
Grandes besos para ti.
AOC.
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