miércoles, 27 de octubre de 2010

El Cementerio abandonado de Cobija





Desolados, esparcidos, transplantados
en la distancia dispersa,
surge el conspirador de la lejania,
desbaratados y perdidos,
disgregados como huerfanos,
en un puñado de polvo
adivino que es el viento,
tras el sol que se ha ido
hace tanto tiempo.

Es sencillo este juego,
está escrito en la sangre,
en la palma de la mano,
en la luna
que separa esas manos.

No trates de ascender
sino de ir hacia adentro,
concede,
traga,
bebe la noche misma
que también tendra su hora.
Lo natal, lo pasado,
todo marca,
y al final tu y yo figuramos
separados por abismos
como dos alas,
sin dejar huellas,
sin dejar sombras,
solo queda ser absorbida
sin inquietud por las rocas,
en la lejanía de tu memoria.

AOC©2010


Ilustraciones: Conrad Roset.

3 comentarios:

Daniel Os dijo...

¡Bello!

Marianela dijo...

como siempre, hermoso lo que escribes!
saludos.

antonia obiol y corcoll dijo...

Daniel y Marianela, gracias por sus comentarios...

Besos a ambos
AOC.

Despedida

Llevo 6 o 7 años publicando mis escritos y poesía con palabras similares, contenidos similares, con gráfica orientada siempre a una visió...