
Nací sin olfato y las pequeñas condiciones olfativas las perdí tras años de tabaquismo, pero la vida me premió con amados seres que lo huelen todo, que auscultan el espacio con su nariz buscando y penalizando aquellos discutibles olores como implacables jueces, discriminando a personas por humanos perfumes que crecen en la química única de cada uno; llegan a las casas oliendo cualquier descuido, olfateando vapores.
A la hora de comer descubren cada una de las piezas con que se cocinó el guiso y alegan por excesos de cebolla, ajo y cualquier cosa que entre en sus catálogos de excesos.
Pero no todo es bendición en sus vidas, tienen escasas condiciones para olerse a sí mismos, ignoran sus abrasivos alientos cuando el hambre los acecha y la química estomacal pide pan, en algunos extremos casos han perdido la condición básica de verse y olerse pero van por el mundo felices pesquisando y catalogando hedores diversos y exóticos...
AOC.©,2010
Gráfica: Ester Garcia.
2 comentarios:
Hey I love how you pick up an idea and run with it. And i crave Ester's work. You have great taste :)
Gracias por tu comentario, tomando en cuenta los graciosos giros ideomaticos a que nos expone el traductor google. Me resultó muy gracioso leer en tu blog: "lamer aquí" en lugar de "hacer click aqui".
Un saludo gigante.
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