La calle se llamaba Merced
estaba tapizada
por un huevillo colonial
de redondas y brillantes piedras iguales;
hacia esquina
con una casa roja
que guardaba en la parte de los muros
próximo a la tierra
un musgo de verde intenso,
que en verano se mimetizaban con el café
de la tarde.
La iglesia de torreón gris
en días calurosos
cobijaba con su frescura
de barro y altura
y sus rubicundas vírgenes celestes
dibujadas en sus cielos.
Justo al final de la calle
en la esquina de la plaza
me encontraba con los ojos
de Pepe Alvarez,
inmensos, transparentes
que se perdían en el verde río
de mis sueños...
A.O.C. 2009
estaba tapizada
por un huevillo colonial
de redondas y brillantes piedras iguales;
hacia esquina
con una casa roja
que guardaba en la parte de los muros
próximo a la tierra
un musgo de verde intenso,
que en verano se mimetizaban con el café
de la tarde.
La iglesia de torreón gris
en días calurosos
cobijaba con su frescura
de barro y altura
y sus rubicundas vírgenes celestes
dibujadas en sus cielos.
Justo al final de la calle
en la esquina de la plaza
me encontraba con los ojos
de Pepe Alvarez,
inmensos, transparentes
que se perdían en el verde río
de mis sueños...
A.O.C. 2009
4 comentarios:
Gracias por mencionarme, ya estaba medio podrido de que me pusieran tercero en el cartel…
Un abrazo,
Pepe
De nada Pepe... llegaste rapido y eso que vas de tercero.
Un abrazo para ti.
Parece que el que va de tercero hoy soy yo… eso me pasa por andar visitando blogs un martes 13.
MARTES 13 bonita fecha para salir de visita... Nadie asegura que llegues... pero estas aqui... por fin llegaste...
Marcados besos para ti
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