



CALCETINES ROTOS
En esta diversificación de códigos
yo recurro a la montaña,
si pudiera me extendería
hacia el mar.
Con el solo animo
de llenarme de su sonido.
Todo se reduce
a un murmullo indefinible
de multitudes que circulan,
máquinas que consumen
energía propia y ajena.
El flautista amaneció temprano
y dejo libre sus notas
para que circularan
por los adoquines
de una vieja plaza
olvidada.
A.O.C. 2008
Ilustración Karto / pinturas: Bazille, Boudin, Grimshaw
No hay comentarios:
Publicar un comentario